15 de marzo de 2012

El último monumento.


Levante la mano el que diga yo.

Luz y sonido.
Estela de luz.
Los monumento siempre están dedicados a algo o alguien y su objetivo es significarlo o representarlo, pero los monumentos también representan al estado y por añadidura al gobierno que lo decide, lo impone y lo paga. Esta doble representación no es casualidad y en gran medida suele ser la verdadera intensión. La lectura que la sociedad hace de la Estela de Luz es también doble, por un lado la significación simbólica del bicentenario de la independencia (abstracta y poco clara) y la del gobierno en turno (abyecto en resultados). Hoy día disociar ambas lectura parece casi imposible.

Cuestionado hasta el hartazgo en cuanto a su costo, pertinencia, forma, función, materiales, significado, localización, discurso y legibilidad al tiempo que dejó muy mal parados a funcionarios, instituciones, constructoras, arquitectos y jurados expertos. El monumento al bicentenario, la estela de luz, la paleta mimi, la suavicrema, la lápida o como sea el apodo de este mes, será o debería ser el último monumento de gran escala que se construirá en el país.

Luz y fuerza del centro.
Estela de Luz

¿Que candidato, gobernador, presidente municipal, artista, escultor, arquitecto, urbanista o ciudadano bien intencionado está pensando en erigir un nuevo monumento de gran escala?; ¿quién estaría dispuesto a correr el riesgo político o profesional de hacer un monumento “bueno, bonito y barato” que si sea abrazado por la sociedad y por los medios?.  Parece que nadie y en todo caso nadie se atrevería hoy a decirlo.

No hay tema para un nuevo monumento, no parece existir pretexto alguno que resulte válido, probablemente lo único que puede ser aceptado -no sin serios y amplios cuestionamientos de parte de la clase gobernante y las buenas conciencias nacionales- sería la construcción de un monumento, memorial o un mausoleo a las víctimas de “la guerra contra el narco”; pero política y presupuestalmente se ve muy complicado que esto pueda solucionarse en buena forma.

Parece que la Estela de Luz es el monumento al fin de los monumentos, el modelo de representación y justificación del estado mediante estos elementos urbanos esta totalmente agotado y resulta tan anacrónico en términos urbanos, sociales y políticos como erigir la representación en bronce del gobernante en turno.

Monumento a Vicente Fox.
Boca del Río Veracruz, Mex.
Foto: La Jornada.




















Derribamiento monumental.
Monumento a Vicente Fox.
Foto: Foxilandiablogspot.